¿Cuándo deberías llevar a tu hijo con un psicólogo?

Ya es bastante difícil para los adultos entender, ordenar y comunicar los sentimientos. Ahora, imagina cómo debe ser para un niño o un adolescente.

La terapia infantil ayuda a los jóvenes a comprender y manejar los desafíos que afectan su salud mental. Estos desafíos incluyen condiciones de salud mental, problemas de comportamiento, eventos traumáticos y acoso.

Deberías considerar llevar a tu hijo a un psicólogo si observas cambios significativos en su comportamiento, emociones o funcionamiento que te preocupen y que persistan durante un período prolongado. 

Es importante recordar que cada niño es único, y lo que podría ser motivo de preocupación en un niño puede no serlo en otro. Siempre es recomendable hablar con un profesional de la salud mental si tienes inquietudes sobre la salud emocional o el comportamiento de tu hijo. 

Estos profesionales pueden evaluar la situación y proporcionar orientación sobre si es necesario consultar a un psicólogo infantil y cuándo hacerlo. La intervención temprana puede ser crucial para abordar los problemas de salud mental en los niños y adolescentes.

10 señales a las que debes estar atento como madre o padre:

🌪️ Cambios drásticos en el estado de ánimo: Si tu hijo pasa de estar generalmente feliz a estar constantemente triste, irritable o ansioso, esto podría ser motivo de preocupación.

😡 Problemas de comportamiento: Si tu hijo muestra comportamientos agresivos, desafiantes, destructivos o disruptivos en casa o en la escuela de manera persistente.

✏️ Cambios en el rendimiento escolar: Si notas un deterioro significativo en el rendimiento académico de tu hijo o si comienza a tener problemas de conducta en la escuela.

😞 Problemas de relación: Si tu hijo tiene dificultades para relacionarse con otros niños o adultos, muestra problemas de socialización, o se aísla de manera excesiva.

🛌 Cambios en los patrones de sueño o alimentación: Alteraciones importantes en los patrones de sueño o alimentación pueden ser señales de estrés o problemas emocionales.

💔 Trauma o eventos estresantes: Si tu hijo ha experimentado un evento traumático, como una pérdida significativa, abuso o divorcio de los padres, puede necesitar apoyo psicológico para procesar sus emociones.

🧩  Preocupaciones específicas: Si tienes preocupaciones específicas sobre el desarrollo de tu hijo, como retrasos en el habla, dificultades de aprendizaje, trastornos del espectro autista u otras preocupaciones de salud mental.

😵‍💫 Cambios físicos sin causa médica evidente: Si tu hijo presenta síntomas físicos como dolores de cabeza o problemas gastrointestinales sin una causa médica identificable, esto podría estar relacionado con el estrés o la ansiedad.

🎭 Cambios en la expresión emocional: Si tu hijo muestra una falta de expresión emocional o, por el contrario, una expresión emocional extrema y descontrolada.

❗️ Autolesiones o pensamientos suicidas: Si en algún momento tu hijo menciona pensamientos suicidas o se autolesiona de alguna manera, es fundamental buscar ayuda inmediatamente.